Intervenciones terapéuticas

Terapia cognitiva conductual 

La terapia conductual moderna es un método reconocido y con base empírica para tratar los trastornos psicológicos y el estrés. En la actualidad, la terapia conductual combina una serie de ejercicios, técnicas y métodos específicos para cada trastorno y adaptados a cada paciente.

Como su nombre indica, este enfoque se centra en cambiar el comportamiento actual. El concepto de comportamiento se toma en un sentido más amplio e incluye no sólo las acciones visibles, sino también los pensamientos, las emociones y las reacciones fisiológicas.

Juntos buscaremos posibles alternativas que le acerquen a sus objetivos personales. En el siguiente paso, trabajaremos para cambiar su comportamiento, condiciones de vida o actitudes actuales. Para ayudarle con sus problemas actuales, utilizamos como punto de partida su biografía individual, su situación de vida actual y su entorno privado y profesional.

Más información therapie.de (enlace abre en una nueva ventana)

Terapie de esquemas

Bild von  aus Unsplash

 

La terapia de esquemas es una ampliación de la terapia conductual clásica.
La eficacia de la terapia de esquemas ha quedado demostrada en estudios científicos, especialmente para personas que luchan con problemas de relación, patrones de pensamiento profundamente arraigados y un éxito limitado con otras medidas terapéuticas (por ejemplo, trastornos de personalidad y depresión crónica). Ofrece una forma de identificar y cambiar patrones de pensamiento y comportamiento poco saludables para lograr una mejor salud mental y calidad en las relaciones.
Un elemento central de la terapia de esquemas es el establecimiento de una relación terapéutica consciente entre el terapeuta y el paciente.
En la terapia de esquemas, el término "esquemas" se refiere a ciertos patrones o trampas de vida que consisten en recuerdos, sentimientos, pensamientos y percepciones corporales. Estos esquemas suelen desarrollarse en la infancia o la adolescencia como resultado de la frustración o el fracaso a la hora de satisfacer las necesidades emocionales básicas. Se desarrollan con el tiempo y pueden resultar estresantes y problemáticos para la persona afectada, tanto en relación consigo misma como en las relaciones interpersonales.
Con la ayuda de la terapia de esquemas, los pacientes consiguen reconocer y cambiar patrones emocionales recurrentes y potencialmente dañinos para sí mismos.

 

Mas información therapie.de (enlace abre en una nueva ventana)